Vacancias y suspensiones. Los alcaldes de Huaraz e Independencia, afrontan pedidos de suspensión y vacancia respectivamente.
Se suma a ello, la compra de kit para la revocatoria de ambos por el FEDIP Huaraz a partir de junio.
En el juego democrático, los ciudadanos tienen esa prerrogativa, justificado o no. Son reglas de la democracia y hay que aceptarlos.
Sin embargo, habría que reflexionar sobre el contexto de ambos temas y por qué se originan. LLegamos a este escenario, por algunas actitudes de ambos, quienes abonaron con sus actitudes y hechos.
Fidencio Sánchez por ejemplo, protagonizó un hecho escandaloso, que es materia de investigación, sobre una presunta coima de 500 mil soles con una empresa contratista. Luego, hubo algunas respuestas confusas. Lo negó, indicó que se habían aprovechado de su «buena fe» cuando entregó papeles en blanco en campaña, pero en otro momento admitió que era su firma. Este tema, motivó uno de los pedidos de vacancia. Hay otro en camino.
En Huaraz, los pedidos de suspensión van por el lado de la actitud del alcalde Rori Mautino y su intemperancia. Le gana el hígado y la intolerancia, eso no es bueno.
Los regidores, algunos de ellos fiscalizan con vehemencia, dentro den sus funciones, a veces levantando la voz, pero hay que entenderlos y la autoridad no está para responder a ese nivel. Hay muchos temas en los que los concejales tienen razón, como el de su asesora personal Rocío Angeles, pero el alcalde Mautino se aferra a su defensa. Como «cabeza» de concejo municipal, debiera lograr un ambiente de respeto entre sus miembros.
Mientras ello sucede, la ciudad se encuentra desatendida en temas urgentes y transversales. El tránsito vehicular, el comercio ambulatorio en Huaraz en Independencia, el alcalde Fidencio Sánchez no habla de obras grandes, como la culminación de a avenida Confraternidad Internacional Este, la doble vía de Centenario entre otros.
Vamos por el segundo año y las cosas tienen que mejorar. Ojalá.
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